El altar de muertos es uno de los elementos más emblemáticos de la festividad del Día de Muertos, celebrada cada año el 2 de noviembre en México. Puede estar compuesto por entre dos y siete niveles, los cuales representan distintos planos de la existencia.
El altar supone la base donde se despliega una ofrenda en homenaje a los seres queridos fallecidos con la intención de que sirva como reencuentro.
Esta ofrenda está compuesta por distintos elementos cargados de significado, veamos.
Elementos del altar de muertos
El agua
Es uno de los elementos esenciales de la ofrenda, ya que está cargado de significados. El agua simboliza la pureza y la fuente de la vida, y se pone en la ofrenda en un vaso, del cual beberá el espíritu para saciarse tras el largo viaje desde el mundo de los muertos.
En ocasiones, también se ponen al lado distintos objetos para la higiene personal del fallecido.
La sal
En contextos bíblicos, la sal representa la purificación. Este elemento se sitúa en el altar de muertos con el fin de proteger a los difuntos para que no se corrompan durante su trayecto.
Flores
Las flores son el ornamento fundamental de esta festividad. Decoran los altares y perfuman las estancias. La flor más utilizada en esta festividad es la del cempasuchil, la cual deshojada se utiliza como guía desde el campo santo hasta la ofrenda del difunto.
Velas y veladoras
Las velas se emplean para iluminar el camino de regreso del difunto al mundo de los vivos, marcan su camino hacia el altar. Suelen ser de color blanco y morado, simbolizando el duelo. A veces, suelen hacer la forma de puntos cardinales, esto permite orientar a las ánimas hacia su hogar.
Copal e incienso
Estos elementos se utilizan con fines purificadores para ahuyentar a las almas malignas y asegurar que la estancia quede liberada de malas energías. También se emplean para aromatizar el lugar.
Petate
Esta esterilla puede tener dos usos principales en la ofrenda. Por un lado, puede servir como elemento de descanso para las ánimas que regresan y, por otro lado, se puede utilizar como tapete para situar los alimentos que se ofrendan.
El pan
El pan de muertos sirve como alimento para los difuntos que transitan por el lugar. La forma redonda del pan de muerto es peculiar porque simboliza el ciclo vital del ser humano. Asimismo, el interior tiene forma de cráneo del difunto y, unas tiras surgen del centro hacia los lados que representan las lágrimas.
El retrato
La fotografía o fotografías de aquellos fallecidos que visitarán la ofrenda, generalmente se sitúan ocultos, de tal forma que solo puedan verse con espejo, lo que simboliza que quien visitará la ofrenda ya no está presente.
La cruz
La cruz fue incorporada por los evangelizadores españoles, y suele estar situada en el último nivel del altar y junto a la fotografía del difunto. Generalmente está elaborada de sal o ceniza, que sirven como elementos purificadores de las almas, para que puedan redimir sus pecados.
Calaveras
Son dulces que suelen estar presentes en la ofrenda, generalmente hechos de azúcar o chocolate. En ocasiones también se escribe en ellas el nombre de los difuntos.
Las calaveras se distribuyen por el altar y representan la muerte, son un recordatorio para evidenciar la permanente presencia de la misma.
Comida
Es un elemento muy importante de la ofrenda. Se preparan los platos que más gustaban a los difuntos para su disfrute durante la visita. Es muy común el arroz, mole, calabaza y fruta.
Bebidas
Las bebidas que se ponen en la ofrenda suelen contener alcohol y normalmente son el tequila, rompope y pulque. Sirve para celebrar la llegada de los difuntos.
Objetos personales del difunto
En el altar también se ofrendan los elementos más personales de los difuntos a los que van dirigidas. Generalmente tienen la intención de que el ánima pueda rememorar los instantes más significativos de su vida. En el caso de adultos puede ser ropa, y en el caso de niños pueden ser juguetes.
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